jueves, 27 de septiembre de 2012
Afuera hay tormenta, aquí dentro ni chispea.
Afuera está lloviendo, pero no importa.
Escucha como caen las gotas contra la ventana. Como hacen ruido mientras se estampan contra el cristal. Una, otra, otra, y otra... No dejan de caer. Me resulta egoísta por mi parte no abrir la ventana, creo que ellas también se merecen entrar dentro, estar aquí, librarse de la tormenta y dejar de pasar frío. Es triste, que su efímera vida tan solo dure escasos segundos, desde que se condensan allí por las nubes hasta que se chocan y se derrumban contra lo primero sólido que encuentran. ¿Pero qué hago hablando de gotas de lluvia? No se, pero es que pensando me he dado cuenta de que realmente, estar contigo, es así, como estar a salvo de esas gotas de lluvia, de esa tormenta.
Sientes que estás protegido, que fuera se puede estar acabando el mundo, inundándose la ciudad, que estás a salvo. Mira esta noche, no hace falta más. El cielo está negro, más negro de lo habitual. No hay estrellas, sólo luces difuminadas por la lluvia. No hay pausa, el agua cae y cala por donde pasa, menos aquí dentro. Aquí estoy bien, y estoy bien porque estoy contigo. Es más, estoy seguro de que si saliese a la calle, me expusiera al frío, a la lluvia, a los rayos, seguiría estando a cobijo de todo eso. ¿Por qué? Sí, porque estoy contigo.
Y pienso también, que si me faltas, estas noches de lluvia, de frío, de tormenta, de truenos y rayos, de noches cerradas y con ese viento entrando por la chimenea, no serían igual. Perdería la seguridad de que estoy fuera de peligro. Tendría frío, mucho frío, y me costaría dormir. El ruido del viento me estremecería y las gotas de lluvia que golpean mi ventana sin descanso, acabarían por mojarme. Quizás no me mojarían la piel, pero seguro que me calarían por dentro.
Es por eso que asusta pensar como sería una tormenta sin ti. Es por eso que asusta pensar una vida, sin ti. Aunque ahora mismo no pienso en que te vallas, ahora sólo pido que truene más fuerte, que llueva más y haga más frío, para estar contigo y abrazarte, para saber que haga lo que haga fuera, contigo estoy a salvo dentro.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)